Si existe un lovetoy que mire más por la complicidad, ese es la bala vibradora. Tú eliges quién lleva el mando: puedes hacerlo tú o entregarte a los caprichos de tu compañero. Compartir el secreto de saber que tu placer está en manos de otro convierte cualquier actividad en algo realmente excitante y divertido. Su modo de empleo es muy sencillo: solo hay que introducirla suavemente en el interior de la vagina y prepararse para disfrutar de sus vibrantes caricias al activarlo con el mando a distancia. Control remoto Como es resistente, hipoalergénico y de textura muy agradable puedes llevarlo en una cena, una reunión de amigos, tomando unas copas o incluso haciendo la compra… en cualquier momento, la diversión está asegurada. Ahora, también te digo, ¡cuidado, que engancha! Pilas AA, no incluidas! Happy Lola, un regalo perfecto!